Prólogo.
-Ese mal nacido me persigue, y sí, habrás notado que no se oyen sus pasos, ni sus jadeos, ni sus gritos chirriantes, y es por el simple hecho de que todo está en tu mente, en tus pesadillas, en las sombras de la noche.
-¿Quién eres?-Pregunté.
-Tu conciencia-.Respondió-.Y no voy a parar hasta que pagues por todo...Sufrirás.
-No voy a sufrir, solo voy ha bailar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario